Search

La Corte Suprema de EE.UU. anula Roe v Wade

Compártelo

Tal como se esperaba desde que se liqueó el documento de uno de los jueces a principios de mayo, la Corte Suprema de EE. UU. anuló las sentencias de Roe v Wade (1973) y Planned Parenthood v Casey (1992), que establecían que el aborto era un derecho constitucional, y les prohibían a todos los estados restringir –parcial o totalmente– cualquier aborto antes de que el feto pueda sobrevivir fuera del útero. Es la primera vez que la Suprema le da pa’tra a una sentencia sobre un derecho constitucional.

¿Aborto prohibido para todo el mundo?

No. Lo que sucede ahora es que cada estado debe decidir qué hará con el aborto. Unos 20 estados, entre los que están Nueva York, Massachusetts y California, seguirán permitiendo el aborto tal y como lo hacían; otros 9 podrían restringirlo en un futuro no tan cercano, si el gobierno estatal pasa a ser más conservador; 12 estados más lo restringirán o prohibirán por completo en los próximos días o meses; y 9 estados tenían leyes ya redactadas (llamadas trigger laws, o «leyes gatillo») para banear el aborto automáticamente desde que cayera la sentencia de la Suprema. 

En esta imagen: a la izquierda, los estados que prohibieron el aborto desde que salió la sentencia; en el centro, los estados que tienen leyes listas y es cuestión de días para que restrinjan o prohíban el aborto (excepto Texas, que ya lo prohibió el mismo viernes); a la derecha, los que podrían restringir el aborto en un futuro.

Las reacciones

Por un lado, los más conservadores celebraron. Un gran defensor de esta decisión es Trump, quien durante su gobierno defendió que cada estado decidiera sobre el aborto y nombró 3 jueces conservadores en el Tribunal Supremo, que votaron por revocar la ley. Pero, aunque los jueces votaron, Trump dijo que esto había sido una «decisión de Dios».

Del otro lado, muchos de los que defienden el derecho al aborto se tiraron a las calles a protestar en distintas ciudades. Biden culpó a los jueces nombrados por Trump de ser el centro para que se tomara esa decisión, y como no hay ninguna entidad judicial por encima de la Suprema, le pidió al Congreso que apruebe una ley federal para recuperar el derecho a interrumpir el embarazo.

Comida para el pensamiento

Este es uno de los temas más controversiales en EE. UU. (y en el mundo entero, en verdad, solo hay que meterse a Twitter). Esta decisión lo que ha hecho es profundizar la división entre republicanos y demócratas y entre conservadores y liberales. Y no termina aquí, porque el juez Clarence Thomas –uno de los más conservadores de la Corte, si no el más conservador de todos– puso en su opinión oficial que en el futuro deberían revisar otros casos que dieron derechos como el matrimonio entre personas del mismo sexo y el uso de métodos anticonceptivos.

¿Te gustó este artículo?

Si no lo has hecho, suscríbete y recibe El Brifin en tu correo

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here